Terapia de Adultos en Córdoba
La terapia de adultos atiende las dificultades que pueda presentar cada persona y supone un proceso de cambio a nivel individual, compartido entre paciente y terapeuta y guiado por los valores importantes en la vida de la persona.
Especialistas en intervención psicológica
La terapia para adultos comprende un trabajo terapéutico individual que abarca diversas problemáticas, como las más frecuentes en la vida cotidiana, las que aparecen después de un periodo de tiempo o situación especialmente complicada, y otras dificultades menos comunes, pero igualmente importantes. Estas dificultades pueden reflejarse tanto en la relación que mantiene cada persona consigo misma como al interaccionar con otras personas, o en ambos aspectos al mismo tiempo.
Entendemos que una situación concreta precisa de intervención psicológica cuando afecta y condiciona significativamente nuestra vida, nos causa un malestar más o menos prolongado, y/o necesitamos ciertas herramientas para hacerle frente. Para abordar esto, realizamos una intervención transdiagnóstica. Adaptamos la intervención a los diferentes contextos y poblaciones para resolver problemas clínicos. Elegimos las herramientas con precisión, evitando el empleo de recursos innecesarios. La intervención se fundamenta en adquirir habilidades que faciliten llevar a cabo acciones comprometidas, y esto nos permitirá llevar “una vida bien vivida”. Buscamos qué factores impiden que una habilidad se lleve a cabo y proponemos, de forma conjunta, conjugada con nuestro paciente, diferentes recursos para resolverlo. Las habilidades se aprenden, se practican, se corrigen o se perfeccionan en sesión para ser trasladadas a la vida cotidiana.
Ofrecemos terapia psicológica para adultos
Tratamientos psicológicos para adultos en Córdoba capital
La intervención es individualizada, por lo tanto, se adapta a las necesidades de cada persona, considerando la situación en la que se encuentre, las habilidades de las que disponga y los objetivos que quiera conseguir. Partimos de estos objetivos concretos para evaluar los valores importantes para el individuo, que serán los que guíen la terapia psicológica. En sesión se practica, se falla, se aprende, se cambia y se mejora. El plan de tratamiento es dinámico, está en continua revisión para optimizar el curso del tratamiento y los cambios conseguidos.
Nos apoyamos en un vínculo terapéutico seguro y consolidado, ya que consideramos que es una clave fundamental durante todo el tratamiento para lograr los cambios propuestos. Es un pilar que trabajamos desde el primer momento y al que volvemos en situaciones delicadas. Nuestra extensa experiencia, formación y constante actualización nos permiten proponer claves y recursos para conseguir las metas importantes en la vida de la persona. Tratamos de brindar apoyo emocional y acompañar a nuestros pacientes en su proceso de cambio, para que adquieran herramientas y estrategias útiles que les permitan superar las dificultades emocionales y mejorar su calidad de vida.
- ¿Qué es la terapia de adultos?>
La terapia de adultos contempla un trabajo terapéutico a nivel individual que puede abarcar diversas problemáticas. Desde un enfoque contextual, el abordaje que realizamos no está formulado para un tipo de problema psicológico en particular, sino para la psicopatología en general, es transdiagnóstico y se adapta a las situaciones clínicas más diversas, ya que busca dar respuesta al sufrimiento humano. Adaptamos nuestra intervención a cada persona, según su contexto, necesidades, objetivos y trayectoria vital.
Mediante sesiones habitualmente semanales, trabajamos de acorde a los objetivos propuestos y acompañamos a la persona en su proceso de cambio, facilitando la adquisición de habilidades que le permitan llevar a cabo acciones comprometidas y que éstas, a su vez, conduzcan a llevar una vida bien vivida.
- ¿Qué se logra con las terapias para adultos?>
Idealmente, en las sesiones de psicología para adultos, gracias al trabajo conjugado, en equipo, entre el paciente y su terapeuta, se van logrando cambios positivos y progresivos en la manera que tiene cada persona de interactuar con sus problemas, su ambiente, sus emociones o sus pensamientos. Este cambio viene impulsado por lo que es importante para el individuo y alcanzado a través de acciones comprometidas.
Entendemos que luchar contra el malestar genera más malestar, por lo que optamos por un enfoque contextual, que parte de la aceptación y el compromiso con valores para conseguir los objetivos propuestos.
- ¿Qué hace un psicólogo de adultos?>
En el proceso terapéutico, el psicólogo acompaña a las personas durante el proceso de cambio. Es una parte de un par conjugado que aporta y actúa como orientador y guía, a través de una relación terapéutica, comprensiva, empática y ética.
La terapia se fundamenta en la adquisición de habilidades y herramientas que resulten útiles para la persona, la puesta en práctica de éstas, la gestión del malestar emocional y el compromiso con los valores importantes para cada individuo. Estas habilidades, cuando se adquieren e integran en el repertorio, facilitan llevar a cabo acciones comprometidas, que son comportamientos que conducen a vivir una vida bien vivida, con o sin presencia del malestar.
- ¿Qué trabajar en terapia con personas adultas?>
Para responder esta pregunta necesitaríamos plantear otras: ¿qué necesita la persona?, ¿qué busca en su vida?, ¿qué aspira a conseguir?, ¿qué echa en falta?, ¿hacia dónde se quiere dirigir?
El trabajo psicológico con adultos abarca las problemáticas más frecuentes, como pueden ser los síntomas propios de la depresión y ansiedad, problemas de autoestima, inestabilidad emocional, síntomas obsesivos-compulsivos, trabajo en duelo, etc. Igualmente, importante son las dificultades interpersonales, problemas familiares, búsqueda de un propósito y otros aspectos que parecen no ser tan frecuentes, o tan necesitados, y sin embargo están presentes en nuestro día a día y nos generan malestar.
Desde un enfoque contextual, el abordaje que realizamos no está formulado para un tipo de problema psicológico en particular, sino para la psicopatología en general, es transdiagnóstico y se adapta a las situaciones clínicas más diversas, ya que busca dar respuesta al sufrimiento humano.