Mediación Familiar en Córdoba
Especialista en Mediación Familiar

La mediación familiar es un técnica de resolución de conflictos de forma pacífica, donde el protagonismo lo tienen las partes. Se trata de una alternativa efectiva a los procesos judiciales, ya que permite una resolución más rápida y económica de los problemas.

El coordinador de coparentalidad es un instrumento que permite la resolución de conflictos de familia en aquellos casos en los que los miembros de esta no son capaces de resolver sus disputas y sostienen un gran nivel de conflictividad.

La mediación familiar es una alternativa efectiva a los procesos judiciales que resulta especialmente útil en casos de conflicto interparental, el cual suele implicar un impacto negativo en la vida de los hijos y en la dinámica familiar en general. A través de una negociación cooperativa, la solución alcanzada implica que ambas partes ganan: objetivo ganar-ganar.

En este proceso, las partes involucradas en el conflicto intentan resolverlo por sí mismas al mismo tiempo que son asistidas por la ayuda de un tercero imparcial, el mediador, que conduce y guía las sesiones hasta encontrar una solución satisfactoria para ambas partes.

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La evidencia muestra que, a mayor protagonismo de las personas en la resolución de sus propios conflictos, mayor es la satisfacción psicológica de los implicados y el compromiso con el cumplimiento de los objetivos y los acuerdos alcanzados. La mediación es un sistema no adversarial que tiene en cuenta las necesidades individuales de los progenitores y particularmente las de los niños, tanto actuales como futuras. La mediación permitirá disminuir la tensión, aumentar la comunicación y diseñar medidas específicas ajustadas a la realidad de cada subsistema familiar. Esto supone un mejor y mayor ajuste a la nueva situación, se minimizan los sentimientos de culpa, y las posiciones de vencedores – vencidos o ganador – perdedor, se incrementa la flexibilidad y la colaboración ante imprevistos o cambios.

Todo ello eleva la satisfacción psicológica y la estabilidad tanto de los hijos como de los progenitores, lo cual a su vez repercute en el bienestar físico y emocional de todos los implicados.

La mediación puede iniciarse en cualquier etapa del procedimiento judicial, antes de iniciar el mismo o durante el mismo. De manera consensuada, se establecerá la nueva organización familiar y, al final de la negociación y con los acuerdos alcanzados, el mediador redactará un documento, el Acta final de mediación y/o el Informe de Acuerdos de Mediación, que con frecuencia permiten agilizar los posteriores trámites judiciales.

Coordinación de coparentalidad, conflicto interparental

El coordinador de coparentalidad es un instrumento que permite la resolución de conflictos de familia en aquellos casos en los que los miembros de esta no son capaces de resolver sus disputas y sostienen un gran nivel de conflictividad.

Si bien la mediación familiar permite negociar las responsabilidades parentales y económicas y el reparto de bienes y deudas, la investigación muestra que los conflictos sobre las pautas de relación o el tiempo compartido con los hijos, son los que mayor disfunción generan, especialmente a los menores. Esto suele provocar múltiples problemas de estabilidad psicológica y de adaptación en los contextos principales de los hijos: familia, escuela y grupo de iguales, lo que puede derivar en problemas de salud.

El coordinador de parentalidad es un profesional con formación y experiencia en dinámica familiar, separación/divorcio, violencia doméstica y mediación que asiste a los progenitores altamente conflictivos para ayudarlos a implementar un Plan Relacional. La función del coordinador de parentalidad es asesorar a los progenitores sobre las necesidades de sus hijos y ayudarlos en la toma de decisiones de forma consensuada. Se trata de una figura imparcial que subraya los temas más importantes a tratar para llegar a acuerdos y pactos, que constituirán el plan de coparentalidad. Este documento es firmado por ambos progenitores, tras lo cual, el coordinador supervisa su cumplimiento y promueve modificaciones si estas fueran necesarias.

A diferencia de la mediación, el proceso está centrado estrictamente en el bienestar de los hijos, igualmente se realizan sugerencias y si resulta necesario se otorga al coordinador capacidad de toma decisiones. Así, en nuestro trabajo como coordinadores de parentalidad identificamos el conflicto, establecemos objetivos ajustados a la realidad familiar, y concretamos plazos para alcanzarlos, revisando su viabilidad y cumplimiento.

Con este proceso tratamos de logar el “divorcio emocional”, dando prioridad a las necesidades de los menores y la funcionalidad de los acuerdos.

PREGUNTAS FRECUENTES

¿Qué es y para qué sirve una mediación familiar?
¿Qué se puede pedir en una mediación familiar?
¿Cuándo es obligatoria la mediación en Córdoba?
¿Cuánto dura la mediación familiar?
¿Cuándo caduca la mediación?
¿Cuándo la mediación es obligatoria?
¿Qué diferencia hay entre una mediación y una coordinación de parentalidad?